Por Blanca Simón Ortiz
Uruapan, Michoacán.- Luis Alberto vive, físicamente no, pero en los corazones de sus seres queridos su recuerdo persistirá y pese a todo el dolor que enfrentan sus padres en ellos hay amor, no hay rencor ni odio y ello es una manifestación de la fe que demuestran a una comunidad.
Así lo señaló David Rafael Montufar Pulido sacerdote de la Parroquia de Guadalupe, durante las exequias del joven Luis, quién fue víctima de la violencia que rodeo a Uruapan el pasado miércoles.
Durante su mensaje, el presbítero recordó que en sucesos como estos no hay palabras que den consuelo a los deudos, no obstante en la Palabra de Dios, si podrán encontrar el alivio a su pena, a la que se han sumado la mayoría de los uruapense.
Exhortó a pedir por la paz en Uruapan, en Michoacán y en México pero sobre todo a reflexionar que estamos haciendo cada quien en nuestro hogar, ya que cada que sucede una situación de este tipo es una ofensa para todos, ya que si bien existe el libre albedrío, también hay que pensar que hacemos con este don que Dios nos dio.
Finalmente puntualizó que al igual que Cristo, Luis vive y posteriormente se realizó el rito para dar el último adiós.
