Como parte de los compromisos adquiridos en la firma de la carta por la tierra.
Por Saraí Rangel
Morelia, Mich.- Al pie del emblemático ahuehuete de la Universidad Latina de América, alcanzado por un rayo en 2024, 98 jóvenes de 16 instituciones educativas de Morelia, recibieron su nombramiento como promotores del Medio Ambiente; parte de los compromisos adquiridos por el Ayuntamiento a la firma de la Carta por la Tierra.
Alfonso Martínez Alcázar, presidente municipal, se refirió a este compromiso que desde 2017, conlleva la generación de acciones y políticas públicas concretas en pro de la sustentabilidad y la recuperación de la biodiversidad, marco en el cual se creó la Secretaría de Medio Ambiente de Morelia.
Ireri Rivera, directora de proyectos sustentables y política ambiental, durante la conmemoración por el Día del Medio Ambiente, destacó que no puede haber desarrollo sin justicia ecológica, y que es menester reconstruir el daño a los ecosistemas más allá de acciones como la separación de residuos sólidos y ahorro del agua.
“Hablar de una Morelia sustentable implica pensar en que las áreas verdes y parques no sean un lujo”, señaló que cada decisión encaminada al desarrollo urbano debe considerar el equilibrio ecológico, y apuntó que la sustentabilidad es una práctica diaria y no una meta estática.
Mateo Alfredo Castillo Ceja, representante de la Carta de la Tierra en México, destacó que la firma y nombramiento de promotores del Medio Ambiente no es un acto simbólico “en sus manos está una gran responsabilidad, tomar decisiones que afectan la salud de los ecosistemas, el bienestar de las comunidades y la dignidad de las generaciones futuras”.
Puntualizó que este 5 de junio Día Mundial del Medio Ambiente, debe marcar un antes y un después en las decisiones del gobierno municipal, “no se puede gobernar igual después de asumir este compromiso, se requiere de una nueva forma de liderazgo, basada en la ética del cuidado, en la justicia socio ambiental y en la escucha de la ciudadanía”.
La Carta a la Tierra es una declaración reconocida por más de 150 países, propuesta surgida del diálogo medioambiental fundada en 4 grandes pilares: el respeto y cuidado de la vida, la integridad ecológica, la justicia social y económica, así como democracia, convivencia y paz.
