Este es un acto de congruencia, pues la violencia de género, bajo ninguna circunstancia se debe normalizar; hoy fui yo la víctima por usar una falda, pero allá afuera hay miles de michoacanas que están siendo víctimas de violencia por ponerse una falda y andar en la calle, por no poder ejercer la libertad de su cuerpo, mujeres víctimas de violencia doméstica, mujeres víctimas de violaciones, de agresiones físicas, y las mujeres que también han sido víctimas de Feminicidio.
A todas ellas, hoy desde la Fiscalía les digo: denuncien, no están solas, levanten la voz.
Desde el Congreso del Estado de Michoacán, hemos trabajado muy duro por crear leyes que sancionen las conductas de violencia que se ejercen contra las mujeres; denunciar la violencia de la que fui objeto, es un acto de congruencia, pero además, lo que quiero es incitar a todas esas mujeres, que desde el anonimato padecen violencia, para que vengan a la Fiscalía a denunciar.
Hoy agradezco las atenciones que recibo en la Fiscalía, quiero que con esa misma intensidad se atienda a cada mujer que llega a denunciar a sus agresores. Quiero decirle a las mujeres que cuentan conmigo, que yo también padecí violencia, y afortunadamente tengo los medios para venir a denunciar. Quiero decirle a esas mujeres que no los tienen, que no cuentan con un micrófono, que no tienen la atención pública, que yo tengo: que se acerquen a mí, a las autoridades a la Secretaría de la Mujer, y tomen el valor para denunciar.
La violencia nunca será un acto de libertad de expresión, esta denuncia pública quiere dejar de manifiesto que no es para censurar a nadie, es para sancionar a los agresores y evitar que la violencia de género escale, porque la violencia es un fenómeno social progresivo. Quien hace un comentario ofensivo en redes sociales, puede ser el feminicida del día de mañana.
