Por Roberto MESTIZO CHÁVEZ
URUAPAN, Michoacán.- No cualquiera puede presumir de ser parte de un numeroso grupo en el que la amistad, el compañerismo y la ayuda mutua han vencido cualquier obstáculo.
Uno de esos afortunados grupos se encuentra el conformado por egresados de la Facultad de Ingeniería Eléctrica (FIE) de la Universidad Michoacana de San Nicolás Hidalgo, en la segunda mitad de la década de los 80’s del siglo pasado.
Cabe mencionar que esta facultad es una de las que tienen baja matrícula, que en ese entonces era de un promedio de 30 estudiantes por cada generación egresada, con profesores estrictos, materias muy avanzadas y horarios muy pesados, teniendo clases mañana y tarde, por lo que sin ser una generalidad, tampoco era extraño que algunos alumnos debieran repetir año escolar y finalmente formaron parte de dos, tres o más generaciones.
Cada dos años, quienes forman parte de este grupo se reúnen en una comida informal; gracias a los adelantos tecnológicos, hoy les es posible la comunicación diaria e inmediata, intercambiando experiencias personales, secretos profesionales, éxitos laborales y muchas, muchas anécdotas.
Ese contacto permanente les ha permitido enfrentar con éxito diversas crisis, como lo fue la pandemia del Covid-19, pues conscientes de que era una realidad y que llegaría el momento en que haría falta atención a los pacientes, mediante cooperaciones adquirieron respiradores artificiales que se facilitaron a quienes los ocupaban, evitando la muerte de ellos, sus amigos y familiares cercanos.
Este año la reunión se realizó el sábado 15 de marzo en la ciudad de Morelia; fue una reunión informal en la que durante el transcurso de la tarde se recordaron algunas anécdotas, se recordó a quienes se han adelantando en el viaje a otro plano, y se refrendaron esos fuertes lazos de amistad, por los cuales acordaron celebrar en junio se este año otra reunión, pero ahora de gala, una cena-baile acompañados de sus parejas.
Como buenos amigos que son, todos tuvieron el mismo trato, a excepción de dos invitados de honor: Ana María Loaiza Díaz, quien como secretaria de la Dirección de la FIE tratara con todos los alumnos, para quienes es una excelente amiga y confidente; el otro invitado de honor fue el doctor en ciencias Dionisio Buenrostro Cervantes, apenas cinco años mayor que ellos, de muchos de los cuales fue profesor y posteriormente fue director del plantel, en donde sigue colaborando como catedrático e investigador.
