viernes, agosto 1, 2025
spot_img
InicioColumnasSigan rascándole los aguacates al tigre... pero háganlo con ética.

Sigan rascándole los aguacates al tigre… pero háganlo con ética.

Carlos Manzo ni es nuevo ni mucho menos un improvisado en la política.

POR ROBERTO MESTIZO CHÁVEZ, DIARIO ABC DE MICHOACÁN, 19 DE SEPTIEMBRE DE 2024.

Uruapan, Mich. – Carlos Manzo ni es nuevo ni mucho menos un improvisado en la política. Se dió a conocer años después que su hermano Juan Daniel, es cierto, pero ambos nacieron en la política, por parte del padre y de la famosa abuela, y el tío abuelo.

 

A mí no me gustó su trabajo legislativo, pero eso poco importa. Pocos «conocedores» de la política creían que ganaría las elecciones del 2 de junio, y mis queridos compañeros del gremio se fueron a la cargada y ni se acordaron del hombre del sombrero.

 

Si alguna duda tenía su servidor, se desvaneció desde el inicio de su campaña, en el encuentro que todos los candidatos tuvieron en las instalaciones del abc. Todos ellos llevaron sus porras, pero a Carlos Manzo lo acompañaron cientos de jóvenes, dispuestos a lo que fuera, si se lo pedía su candidato. Y cuando un joven se entrega a algo o alguien porque cree que es lo mejor, nada lo detiene.

 

Así que para mí no fue sorpresa su victoria electoral del 2 de junio, pero el hecho de sacar 3.5 votos por cada uno del segundo lugar, no es algo que se vea todos los días.

 

Y esa tremenda diferencia -aigo así como más de 90 mil votos contra menos de 30 mil- no se debió a apoyos de grupos políticos o de otro tipo. Esos votos se dieron porque la gente confió en él, creyó en su palabra.

 

En más de 30 años de ejercer este oficio, nunca había visto algo parecido.

 

Pero muchos que se dicen periodistas aún no lo creen. Piensan que en la política existe la suerte o la casualidad. Y no.

 

Y nuevamente cambiaron de playera y son Carlitos por aquí y Carlitos por allá. Pasaron casi tres meses desde el día de la elección hasta el día en que Carlos entró en funciones y los del gremio seguían creyendo que se trataba de un improvisado con suerte.

 

Luego, dos semanas de conferencias de prensa nocturnas, en las que no se cansaba, Carlos, de mencionar a la «prensa chayotera, ustedes ya saben quiénes son», y todos como si nada.

 

En la conferencia de prensa de este lunes, le mencioné públicamente que tanto en la ceremonia del grito como en el desfile del 16, noté que la gente salió a ver a su presidente. Y lo dije de manera honesta, porque así lo percibí. Mis queridos compañeros de inmediato comenzaron a decir que ya estaba igual que un tal Lord Molécula, o algo así. Tan interesados en la burla, que imagino que no alcanzaron a escuchar cuando rematé diciendo que no lo dije por halagarlo, sino por hacerle ver que ese apoyo ciudadano representa un mayor compromiso.

 

Se habla mucho de ética personal, ética profesional. La que sea, la ética no la aprendes en un libro de texto de secundaría o preparatoria. La ética, se aprende en casa.

 

Una de las primeras cosas que me enseñaron mis maestros de periodismo, fue a tener ética, a informar, a no mentir, a verificar la información que recibía. No tengo licenciatura en periodismo ni en medios de comunicación. Las maestrías y los doctorados, en mi familia, los acapara una de mis hermanas.

 

Pero les puedo asegurar que en más de 30 años de ejercer este oficio, seguramente me he equivocado en varias ocasiones, pero no hay quien pueda llamarme mentiroso o acusarme de chantajista.

 

Por eso me molestó mucho ver ayer que en X, antes tweeter, apareció un fulano diciendo una serie de mentiras y calumnias, contra el gobierno municipal de Uruapan, al que ya dió por fracasado.

 

Creo que el fulano se llama Juan José Rosales, o lago así, quien dijo que si con Carlos Manzo han aumentado los robos de vehículos, los asaltos a mano armada y los asaltos a las tiendas Oxxo, y citaba como furnte informativa s las redes sociales.

 

En pocos minutos me enteré que su comentario era el texto íntegro de la página de un fulano que trabajó en la policía municipal con Nacho Campos, y que ahora está sin empleo.

 

Para empezar, pues ese JJR quedó más desprestigiado que nadie, y de pasó se llevó entre las patas a mis inocentes colegas.

RELATED ARTICLES

Most Popular