- En el Día Internacional de las Niñas en las TIC, Erika Monserrat Correa, una joven moreliana, comparte su experiencia en este campo de estudio, pues consideró que falta más participación de ellas en las matemáticas, las ciencias, la tecnología y la ingeniería.
- En Michoacán, la UNAM ofrece una carrera que fomenta el acceso y la participación femenina en las TIC.
Morelia, Michoacán.- Elegir una licenciatura no es tarea fácil, pues implica decidir el rumbo profesional de toda una vida. Erika Monserrat Correa Hernández vivió esa encrucijada, tras concluir sus estudios de preparatoria en el CBTis 149, donde cursó la carrera técnica en Ofimática. Consciente de sus múltiples habilidades, estudió la Carrera técnica en Gastronomía, pero, seis meses antes de obtener su título culinario, también decidió aplicar y matricularse simultáneamente en la Licenciatura en Tecnologías para la Información en Ciencias (TIC) de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Campus Morelia.
A un año de concluir sus estudios en la segunda carrera, se siente convencida de la riqueza que surge al fusionar las TIC con las ciencias biológicas. A Erika le apasiona descubrir patrones en datos que tengan un impacto en el mejoramiento de la calidad de vida en nuestra sociedad. Hoy se siente orgullosa y satisfecha de haber unido su formación gastronómica con el análisis de datos, convencida del profundo impacto social que pueden generar las TIC en combinación con las ciencias biológicas.

En el marco del Día Internacional de las Niñas en las TIC, Erika explica cómo la ciencia de datos, el aprendizaje automático y la inteligencia artificial están revolucionando la forma en que entendemos la vida y la salud. Gracias a estas herramientas, las áreas de Biología Computacional han avanzado dentro de áreas como Genómica, Ecología microbiana, Simulación de sistemas biológicos, Procesamiento de imágenes celulares, Modelado de propagación de agentes biológicos, Optimización de procesos biotecnológicos, entre otras. Estos avances se traducen en soluciones innovadoras y cada vez más precisas para el diagnóstico, la prevención y el tratamiento en salud. A pesar de todo este potencial, son muy pocas las niñas y adolescentes que conocen o se atreven a explorar este apasionante campo.
“Mucha gente que no conoce bien el campo tecnológico, lo asocia sólo con sistemas computacionales o programación básica. Sin embargo, el campo de las TIC es profundamente multidisciplinario: sirven a todas las áreas del conocimiento, desde el método científico y la investigación en biociencias, hasta el análisis de datos, la estadística avanzada y la visualización científica; se aplican en ingenierías, artes, humanidades, salud, finanzas, medio ambiente y más. Cada día surgen nuevos enfoques y herramientas que conectan disciplinas y abren fronteras”, explica Erika.
En la ENES UNAM Morelia, la planta académica ha creado un entorno de equidad de género donde se alienta a las estudiantes a fortalecer sus habilidades en matemáticas, ciencias, tecnología e ingeniería. Para Erika, eso constituye un espacio seguro en el que las mujeres pueden desarrollar todo su potencial y dedicarse a proyectos de gran impacto científico.
“Aquí, en TIC, el profesorado impulsa la confianza de las jóvenes. A veces te sientes rodeada de compañeros hombres y eso puede opacar tu seguridad, pero en este programa nos dan las mismas oportunidades a todos y todas”, comparte Erika, quien confía en que cada vez más niñas y jóvenes verán en las TIC una forma de crecimiento profesional y personal.
COMUNICADO